''Ellas, bálsamo para tu herida, la vida tiritando en una estrella... luciérnagas que tiemblan en tu pecho''
Muy buenas noches y bienvenida de nuevo, querida Melancolia...
Debo decir, que estoy algo cansada de estos ataques tuyos, y todos por la espalda. Es como si esperaras a que yo fuera feliz, a que las sonrisas me salieran de tres en tres para venir a derrumbarlo todo.
Como la caída de una torre... cuesta mucho construir, a veces unos meses, unos años.. o toda una vida; sin embargo solo hacen falta un par de minutos, de segundos... para destruirlo todo.
¿No es posible que exista el equilibrio?. No todo tiene que ser bueno, pero tampoco es justo que el lado malo de la balanza ultimamente esté pesando tanto.
He sentido el impulso de llamarlo, como el que llama a un viejo amigo. A uno fiel; a uno que sabes que a pesar de todo va a dejarlo todo por ti. Y me ha dado miedo llegar a esa conclusión. Él lo dejaría todo por mi, por lo que fui, y supongo que por lo que fuimos.
He llegado a echar de menos que alguien supiera que es lo que me pasaba solo mirándome a los ojos, o que detectara si me temblaba la voz al otro lado del telefono... Porque él me comprendía, me arropaba para que no cogiera frío, me daba las buenas noches, los buenos días.. Se acordaba de mis fechas importantes, me daba ánimos. Se sentaba conmigo a estudiar inglés, ponía las canciones que me gustaban, veíamos monologos repetidos y nos reíamos antes de acabar la frase...
Podría estar hablando de mi mejor amigo, pero por desgracia no es así...
Si lo que yo tenía es lo que todo el mundo anda buscando... ¿por qué no era feliz? ¿por qué algo me impulso a seguir buscando?.
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