![]() |
Rota '11 |
30 de diciembre de 2012
Día 1.
29 de diciembre de 2012
Segundo Diciembre sin ti.
Creo que por fín se terminó el escribirte. He cerrado nuestra puerta. Nos he superado... Yo hace 11 meses me prometí no volver a pasar un Diciembre sin ti, pero hay promesas hechas para romperse; y esta es una de ellas. Segundo Diciembre sin ti. Y los que quedan.Y no duele. Solo pica. Y ni lo noto. Atrás queda el dolor, la rabia, ese descorazonamiento tan romántico... Atrás quedas tú, mi amor no correspondido. Aquí te quedas. Encerrado en todas las líneas que escribí pensando en ti.

19 de diciembre de 2012
Destrozada pero guapa.
Nunca volvería a pedirte que me llevaras al fin del mundo... ¿para qué? si seguro que a mitad de camino nos quedaríamos sin gasolina y tú te enfadarías y me dirías que nunca más encucharías ninguno de mis caprichos. Entonces yo echaría a andar y te diría que para llegar a alguna parte hay que andar bastante. Y me dejarías andando sola y yo nunca encontraría el fin del mundo, pero si en fin del mio.
18 de diciembre de 2012
Introspección
Hablas del desamor con una intensidad... Que por un momento creo posible la imágen de tu corazón saltando por los aires, esparciéndose en forma de virutas por todo tu pecho. Luego me imagino tu mano temblorosa intentando recoger los pedazos, tu mano gotea sangre y tus ojos lloran pero paras. Juntas los trozos y queda algo deshecho, abstracto. Se que es increíble pero me imagino a tu corazón agonizando, suplicando una muerte digna, suplicando que deje de dolerle la poca vida que aún respira... Y entonces te miro. Y de la manga te sacas una sonrisa que me hiela la sangre, porque soy consciente de que tu interior es oscuro... Ahora entiendo porque cuando te miro a los ojos no te encuentro... Porque estás muy lejos... Sopesando la idea de cortarle al corazón las venas, de ahogarle con la almohada. Dices que tu corazón no te sirve para nada, que late solo porque tu respiras y respiras porque no tienes ni fuerzas para soportar no hacerlo. Tu mirada habla con tanta intensidad del desamor... Que ahora puedo jurar que una persona se puede morir de amor. Se puede condenar.
Se supone que el amor es precioso, pero lo cierto es que es el arma más atroz que existe. El amor duele. El dolor da vida. Pero el vacío cuando EL te falta no es comparable a ningún dolor, es una nada tan terroríficamente nítida... Que a veces creo ver en tus ojos que no quieres la vida Laura. Que lo único que quieres es seguir sintiendo esa nada, esa sin pena; esa sin gloria. Ese desamor.
12 de diciembre de 2012
11 de diciembre de 2012
10 de diciembre de 2012
Ama. Perdona. Cicatriza. Olvida.
La primera vez que te rompen el corazón piensas que es la más dolorosa de todas... Pero no es así. Las que vienen detrás son más duras porque siempre nos solemos decir ese 'nunca más' y sin saber cómo ni por qué te encuentras otra vez con el corazón en un puño, sangrante, asustado como un niño al que bañan por primera vez. Y te pide tregua, te dice que ya está bien, que no puede soportar una puñalada más... Es entonces cuando se te ocurre volverlo piedra, sin saber que cuando una piedra se rompe lo hace en mil pedazos. Una puñalada cicatriza y puedes seguir viviendo, es una marca que está ahí pero no duele. Y una piedra... Bueno, una piedra está muerta incluso antes de romperse.
El blanco de los vestidos de novia.
Casi puedo afirmar que ver vestidos de novia nos vuelve vulnerables. Esos corpiños brillantes, esas faldas de fantasía, esas colas interminables... Y ese color blanco que parece querer gritarle al mundo que la inocencia existe al menos un día en la vida de toda mujer. Ja... Inocencia... La inocencia se pierde dos veces en la vida; la primera vez te rompen el himen y la segunda te rompen el corazón... Y esta perdida es la más dolorosa puesto que tarda años en dejar de doler y encima nunca se olvida.
Supongo y espero que al ponerte un traje de novia algo en el Universo se active e impida que el pasado sea el protagonista. Espero que en mi cabeza solo aparezca la persona que va esperarme en altar, y en casa, para el resto de mis días, y no aquellos capullos que llevaron a mi corazón a un callejón oscuro para darle una paliza.
9 de diciembre de 2012
Escribiendole al desamor.
Si hay algo que une a las personas es el dolor. Es la perdida. La sensación de que quien llora te entiende. Y no es verdad. Nunca se crearán dos sentimientos iguales, nadie llorará como tu aunque las lágrimas parezcan gemelas. Dicen que el dolor de un corazón mutilado es idéntico en todas las personas los primeros cinco minutos, como los recién nacidos, pero con el paso de las semanas ese dolor va haciendose único y te separa de la gente... Porque sientes que nadie te entiende, porque te duele cada uno de los pedazos en los que estalló tu 'para siempre' y no eres capaz de describir el escozor que notas en el alma, el vacío que te llena el pecho cuando el eco te devuelve el cruel adiós que tus oídos intentaron no escuchar.
A todos nos han roto el corazón alguna vez... El truco es perdonar, cicatrizar y dejar que un nuevo amor retire las vendas. No te quedes lamentándote, porque así solo pasará una cosa: el tiempo; y tu corazón puede volver a sanar, pero el reloj no corre hacia atrás.
4 de diciembre de 2012
Y este no poder me mata.
Quisiera poder olvidarme de ti todos los putos días de mi vida.
Quisiera poder ser capaz de sentir por alguien más, por alguien que no seas tú.
Quisiera poder avanzar, dejarte atrás.
Quisiera poder pensar en la decepción tan absoluta que inundó mi vida cuando fuiste capaz de olvidarte tan rápido de todo lo que me pasaba.
Y... quisiera poder herirte, solo una décima parte de lo herida que me dejaste tú.
27 de noviembre de 2012
La fuerza de la Vida.
14 de noviembre de 2012
Cuando de un 'nosotros' ya no quedan ni mis ganas.
Y de todo eso aprendí que no se puede querer tan fuerte, no se puede quemar tanta vida del tirón porque luego los días normales te parecen poco, se te hacen largos o se te hacen cortos pero los sientes inútiles. Pierdes el sentido por todo, nada te llama la atención y cada detalle insignificante que te encuentras a lo largo de la semana puede hacerte recordar aquel incendio de amor con la fuerza de cien mil cañones.
No es práctico que las relaciones que se acaban no puedan cerrarse en cajas, guardando ahí tanto el amor como el dolor. Guardar los recuerdos para que no les busques por la noche, para no atraer el insomnio a los pies de la cama. Guardar los días felices para no compararlos con tus días de mierda... Borrón y cuenta nueva. Amnesia. Que se te olviden los lugares que mirásteis a la vez, las fechas, las películas que visteis juntos, las canciones que os dedicásteis. Los viajes, las noches compartiendo almohada, las confidencias, los te quieros que nunca escucharon respuesta. Guardarlo todo para que no estorbe. Borrarlo todo para que no duela,

13 de noviembre de 2012
Dejaré crecer tanto la hierba que no volverás a tumbarte en ella.
Empezó a morir cuando decidió no concederle otra oportunidad al amor. Y ahí sigue, escuchando canciones de desamor, amargandose la vida con limones y chupitos de gasolina, quemándo la esperanza, desangrando la ilusión...

7 de noviembre de 2012
Distancia de frenado.
La historia de la distancia de frenado:
Yo estaba sentada en su cama, y él trasteaba en el ordenador buscando test. Yo me leía por tercera vez la misma página del libro amarillo porque no podía dejar de mirarle y sonreirle. Empezó a hacerme preguntas. Yo no tenía ni idea y fallaba, pero él tampoco es que las acertara todas. Llegamos a la pregunta seis y decía algo así como que si la distancia de frenado aumentaba o disminuía si el turismo iba cargado... No lo entendí. Me cogió de la mano, tenía ya esa cara de 'nerviosismo' que se le ponía cuando intentaba explicarme algo que para él era sencillo y que yo no pillaba ni por accidente... En el pasillo, me dio un empujón para que 'corriera' y debía pararme cuando él dijera YA. Y eso hice. Luego, montándole a caballito hicimos lo mismo. Y me dijo: ¿Lo has visto?. Y volvió a explicármelo.
Son estas 'tonterías' las que me sacan una sonrisa de vez en cuando. Hay que quedarse con lo bueno, siempre, porque si no nunca más encontrareis el valor de sonreír.
Mi Romeo, mi Don Juan, mi amante de Teruel, mi Marco Antonio...
6 de noviembre de 2012
Nuestros finales.
A veces pienso que los finales serían más fáciles si lo supiéramos de antemano. Como cuando te cuentan una película, o el argumento de un libro... el sock no es tan tremendo. Ni tan duro. Y el duelo no dura tanto. Claro, que, por ejemplo, si yo hubiese sabido dónde estaba nuestro final habría hecho desaparecer todos los calendarios de este mundo para que ese día nunca llegara. Habría retrocedido cada domingo al anterior domingo para alargar nuestras semanas, nuestros meses, nuestros años... Se que suena a locura y que soy solo yo la que hubiera pedido más horas contigo, pero cuando conoces el amor tan de cerca luego es imposible volverlo a encontrar en otra piel.
Encontraré reemplazo, porque el ser humano es así, necesita llenar los huecos que se van quedando vacíos; pero yo se que siempre le voy a dejar espacio a tu nombre, por lo que hemos sido y por lo que he aprendido.
30 de octubre de 2012
26 de octubre de 2012
Dile a ese gilipollas que no te vuelva a robar ni una sonrisa más.
25 de octubre de 2012
24 de octubre de 2012
De colores.
No supe quererte a medias.
No me gustan las medias tintas. Si lo puedo dar todo por ti... ¿Por qué conformarme con darte media sonrisa?, ¿para qué darte unas horas de mi tiempo si puedo darte toda mi vida?. Así funciono, y es algo que tengo que cambiar. Por fín he aprendido la lección. Por fin comprendo que no puedes dar todo por una sola persona porque cuando esta se vaya tú te habrás quedado sin nada. Y no se trata de egoísmo, se trata de aprender a querer mientras a la vez te quieres tú. Es un fifty-fifity. No hablo de querer a medio gas, hablo de querer de forma sana. De quererte a ti. De quererle a él. De querer un nosotros, pero de amar un YO. Un YO sin un TU.
Se puede ser feliz estando solo; el problema llega cuando te das cuenta de que la felicidad no existe si no la compartes. Y ahí vuelve a empezar todo.
23 de octubre de 2012
La vida pasa y tu igual.
Pido llorando al cielo un poco de razón, pido que vuelvas con mi corazón (¡que ya está bien!) y entiende si te ofendo que no es mi intención... Joder, si es que lo que duele no es que te hayas ido, más que no tenerte me duele tu olvido, porque... que sepas que
Que llegara como llegó.
Tu eras la luz que iluminaba el fondo del camino, te pierdo y no encuentro salida de este pozo sin fondo, me ahogo si tu no me salvas... No consigo recordar mi vida sin ti a mi lado, si es que no quiero olvidar lo que hemos pasado, quiero que nunca se enfríe este amor que me quema los dedos, que me hace ante ti vulnerable, y todo deja de ser importante.
Solo importaba mi cama y nosotros queriéndonos dentro, me dormía mirando tu cara y tocando tu pelo, pensando que a veces la vida supera a los sueños, y cierro los ojos, lo intento, pero ya no lo creo.
22 de octubre de 2012
Solo hablamos de noche. Y a escondidas.
Y así pasan las noches, una detrás de otra. Enganchandome a sus caricias de buenas noches y sobreviviendo a la decepción de despertarme sin su aroma en la almohada ni en mi pelo. Siempre desaparece con la luz del sol... y vuelve a la luz de la luna. Mientras tanto sigo sola. Y sola seguiré, porque no hay nada que me llene tanto como el fantasma de la persona que tanto lloré (
Si deseas olvidar algo inmediatamente, escríbelo en una nota, como si fuera algo que tienes que recordar.
Me paso por aquí siempre que él me escuece de repente, para aliviar un poco ese 'le echo tanto de menos que voy a quedarme en nada como no le eche de más'. Y no encuentro consuelo en las personas, ya que lo único que saben decir es que olvide. Como si fuera tan fácil como ponerse a dieta, o como cambiarse la camiseta.
21 de octubre de 2012
'Ya no te quiero querer'
11 de octubre de 2012
Revenge
9 de octubre de 2012
Se acabó.
Ya estoy harta de echar de menos. De desgarrarme el pecho día y noche, de saltarme su inicial en la guía telefónica, de taparme las costillas izquierdas para ocultarme esa inicial. Mi autodestrucción. Estoy harta de bucear en el pasado, quizá fue mala idea no hacerlo en alcohol... pero si yo tengo que 'curarme de él' a base de cubatas, estoy segura de que antes de sanar moriría de un puto coma etílico. ¡Ni todas las botellas de ginebra del mundo pueden lavarme la herida que llevo por dentro!. Que ya han pasado cinco meses y aún no he dejado que nadie me cosa a besos... Todo me duele a veces. Todo. Hasta lo bueno me está haciendo una úlcera en una esquina del corazón. Y por cierto, el muy cabrón sigue latiendo. ¿Es que no se ha dado cuenta de que no me quedan ganas de escucharle latir... sin ti?.
Me siento Gilipollas, como nombre propio, cuando se me escapa una frase directamente para él. No se con que derecho mi mente, el destino, o la vida se permiten el lujo de dejarme pensar en él ni siquiera por un segundo. ¡Que duele!... mucho. Muy dentro. Es como una canción sonando en un disco rayado. Y no lo puedo parar. Y quiero que se acabe esta puta canción. QUIERO QUE ACABE TU TIEMPO EN MI CORAZÓN, JODER. Otra vez usando la segunda persona del singular. Laura, ¡que no existe!.
Silencio.
Pum-pum
pum-pum
pum-pum
pum-pum
De pronto un recuerdo y todo se acelera. Va tan rápido que puedo sentir como se contrae, me duele hasta la piel, como si una mano me atravesara el pecho y hurgara por dentro. Y lo tocase todo.
Se acabó. Se acabó este sin vivir. Voy a darle una oportunidad a la vida, voy a sonreírla y a esperar que me sonría. Pero a él ya no le espero. Ya no. Y espero con esto haber aprendido la lección. ''No esperes demasiado ni quieras mucho, porque ese mucho termina doliendo demasiado.''
4 de octubre de 2012
No dije para siempre pero, ¿quién dijo hasta nunca?
No puede entrar nadie si él no ha salido. No hay sitio. Y por aquí todo sigue revuelto con sus cosas. Estoy llena de sus movidas, de sus canciones preferidas, de sus risas, de cenas, de cañas, de prisas. De partidos perdidos, de noches ganadas, de sesiones de cine, de tardes de piques. Llena de mañanas de estudio, de viajes en coche... De piezas de puzzle, de fotos robadas, de noches de ron, de bailes pegados, de días solos. Esto está lleno de rosas con espinas, de alambres, de incendios. Quiero que se vaya y quiero retenerlo...
30 de septiembre de 2012
No se puede vivir de recuerdos.
El famoso 'Buenos días princesa' ya no me emociona, y el 'Tengo ganas de ti' ya no me lo creo.
28 de septiembre de 2012
27 de septiembre de 2012
Por fuera sonriendo. Por dentro en ruinas, como Roma.
No duermo durante días porque espero su 'Buenas noches', y la gente me mira con pena y dice: -Estás bien pillada, eh?. Y yo les contesto que estoy bien jodida. Que todo lo bonito que tiene el amor lo tiene de horrible el olvido, que todo lo corto que es el 'nosotros' es todo lo largo que es el 'sin ti'. Que a veces me preguntan por 'TI' y se me escapa un '¿ NOSOTROS?'. Que estoy tan desesperada que hasta escribo mi nombre separado, Lau ra, para sentir su vacío, para recordarme, para egañarme, para hacerme creer que nada en esta puta vida pega si no es 'CONTIGO'.
Que YO no tiene sentido sin antes no va un TU. Que la salsa rosa no me pega con las gambas, que el algodón de azúcar no me pega con la feria, que el blanco no le va al negro, que el yin y el yang es basura, que solo me pega su recuerdo. En la cara, en los brazos, en todos lados...
13 de septiembre de 2012
Todas las veces que he tenido ganas de ti...
Lo cierto es que él y yo nunca hemos sido de para siempres, y yo al cerrar los ojos deseé que me besara. Simplemente, sin pensar en más allá. Y me besó. Pero al sentir su contacto seguí soñando. Y deseando. Hice trampas, ¿vale? Y quizá por eso lo segundo no se cumplió. Yo que se, no sabía que veníamos al mundo con los deseos contados y que no te conceden ni uno más de los que te tocan. Vaya mierda, porque creo que los míos se agotaron para siempre el día que deseé en ese partido que sacaran los de AZUL.
9 de septiembre de 2012
Me molesta que haya parejas sentadas en el que era nuestro parque.
7 de septiembre de 2012
Estoy empeñada en darme de ostias con mis sentimientos.
Hoy no se me ha ocurrido nada mejor que amanecer pensando en nuestro primer beso. En esa noche. En mi portal. Su mirada fija. Sus manos en mis mejillas. Sus labios.
Lo recuerdo todo. Su jersey azul. Mi blusa gris. Su pelo despeinado. Mi trenza. Sus vaqueros. Mis pantalones negros. Sus miedos. Mis dudas.
No me gusta decir que 'lo recuerdo como si fuera ayer', porque en realidad fue hace mucho tiempo. Casi un año. Y en este tiempo me ha dado muchos besos, pero el primero... El primero no lo quiero olvidar.